Alcemos nuestra bandera por una causa digna,
Porque somos idiotas.
Para aprender de la luz, tenemos que conocer la oscuridad… ¡así que no llores!
Incluso si todo llegase a encajar, ¿realmente no hay esperanza?
¿Podemos algún día acercarnos a la esperanza sin nada a nuestro nombre?
La sombra de aquel momento de brillantes ideales,
Aún sigue arrastrándose, volviéndose una con la oscuridad.
Quiero viajar por los cielos de vez en cuando, viendo el azul de un mundo diferente;
Yo admiraba esos colores que tiñeron sin vacilación.
Como un joven, ¡quiero bajar la vista desde lo alto!
Hay una versión de mí aquí, mirándome con ojos juzgadores.
¿Hasta dónde podemos llegar sin perder nuestros ideales?
Al mismo tiempo que hacemos ver que queremos acercarnos a la realidad — tan seca.
Uno puede realmente saborear la dulzura cuando conoce la amargura,
Incluso si significa que perderás algo por el camino.
El aroma que se evapora en el asfalto asfixiado es un signo del comienzo del verano,
Marcado por una lluvia torrencial que cierra la temporada de lluvias.
Un aún desconocido amanecer,
Y el final del horizonte allí acechante,
No terminará a la vista… sino en un trance, o visión.
Ese cielo sin fin, aún ahora, está más cerca de lo que creemos…
Pero la ilusión de que podamos alcanzarlo aún parece muy distante.
Como un joven, ¡quiero bajar la vista desde lo alto!
Decir que no podemos regresar equivale a nada más que a hacerse el duro.
El joven simplemente declaró que había llegado hasta su fin aquel día.
Y esas alas que se suponía te debían haber llevado…
Quiero viajar por los cielos de vez en cuando, viendo el azul de un mundo diferente;
Yo admiraba esos colores que tiñeron sin vacilación.
Como un joven, ¡quiero bajar la vista desde lo alto!
Decir que no podemos regresar equivale a nada más que a hacerse el duro.
Hay una versión de mí aquí, mirándome con ojos juzgadores.