¡Sé mío!
¡Besa y llora con tu deseo indiscutible!
¡Quiero mirar abajo desde la cima,
Una vez todo esté a mi alcance!
La gente siempre dice, “El mundo está en su fin,”
Pero ahora mismo esas palabras encierran una extraña autoridad.
Camino de la mano con la fascinación,
Pero dejaré el resto para después de una siesta.
Estoy haciendo todo lo que me place,
Pero desearía que alguien interfiriera,
¡Pues seguro que ganaría la lucha!
¡Sé mío!
¡Besa y llora con tu deseo indiscutible!
¡Quiero mirar abajo desde la cima,
Una vez todo esté a mi alcance!
¡Es mío!
Si hay algo que quieres,
¡No le quites la vista de encima!
¡Quiero una victoria absoluta!
Ese es mi simple y sencillo lema.
Los ángeles culparon a su diosa,
Y ahora se reúnen en deshabitadas tierras.
Las estrellas centellan arriba en el cielo,
Y puedo sentir que se acerca una tormenta.
¡Di cualquier cosa que tengas ganas de decir!
¡Cambia de ropa delante del espejo una y otra vez!
¿Escogerás ser bueno o malo?
¡Sé tú!
Deja tu máscara puesta, ¡susurrando en la estacada!
Nunca se juzga a los héroes;
Una trivialidad de los viejos bien y mal.
¡Eres tú!
Si no te gusta, vuélvete más fuerte de lo que eras ayer.
Hacer las cosas a medias no tiene ningún valor;
Ve con todo en un paso final.
Encuéntrame,
Cree en mi,
Y rómpeme en pedazos;
Lo quiero, lo quiero, ¡lo quiero!
Las cosas que aún he de ver,
Todas las absurdidades,
En su brillante gloria;
¡Las quiero! Nací de mi deseo por ellas,
¡Y se acabó el tiempo de jugar!
¡Sé mío!
Mi nombre es, “La Cómplice del Instinto”,
Una razón para la acción que nunca me traicionará.
¡Es mío!
¡Besa y llora con tu deseo indiscutible!
¡Quiero mirar abajo desde la cima,
Una vez todo esté a mi alcance!