Las cosas que no podemos ver son de lo más maravillosas.
Conque siéntelas. Y entonces cree en ellas.
No has de dudar del tiempo que no te incluye.
Conque adelante, imagínalo. Y entonces cree en él.
Aunque alguien muestre una actitud desinteresada,
Siente tú el torpe amor en su interior. Y entonces cree en él.
Sobre todo cuando las cosas no vayan bien,
Sí, mira en tu interior. Cree en el futuro.
Me harto tanto… me harto tanto…
Si para empezar no hubiéramos creído, ¡ni siquiera habría razones para dudar!
¿Me estás escuchando, Dios?
¿Te has percatado de esta trampa?
Cuanto más difíciles de decir, más bellas son las palabras.
Conque imagínalas. No oses pronunciarlas.
No debes ir tras los días pasados.
Sí, céntrate en el ahora. Cree en el futuro.
Me harto tanto… Me harto tanto…
¿No fuiste tú quien hizo este mundo tan complicado?
Pues disculpa mis palabras, Dios,
Pero aquí todos tenemos un hueco en nuestros corazones.