Esa noche, te dije que quería entrar a un festival de bandas.
Esa noche, te dije que quería sacar un CD.
Esa noche, escribí una canción donde cantaba sobre ti.
Esa noche, sentí que quería ver todo pasar contigo a mi lado.
Esa noche, hice una sola promesa;
Esa noche, te dije que te mostraría un sorprendente espectáculo.
Por ti, del bosque que no duerme,
Decidí que te mostraría un sueño del que nunca despertarías.
Cuando hice mi CD, te metías a escondidas en Tower Records,
Revisando el área frenéticamente mientras luchabas contras las lágrimas.
Metías pines de edición limitada en tu bolsa,
Pretendiendo que no pasaba nada.
Pensé muchas veces sobre cómo hacer todo de nuevo, pero,
Probablemente solo terminaría tocando mi guitarra todo el tiempo,
Y al final nada cambiaría.
Las cosas no salieron tan bien, pero puede que esté bien así;
Me pregunto si aún escuchas la canción que te di.
Cuando salía en la Tv, lo ponías a grabar,
Y te sentabas reverentemente, mirando la pantalla, dejando caer tus lágrimas.
Gentilmente llevabas un cigarro a tus labios, a pesar de que nunca habías fumado,
Tratando de recrear el recuerdo de mí en esa noche.
Cuando subo al escenario, te paras en un lugar lo suficientemente lejos,
Mirando abajo, para no ser vista, luchando contra las lágrimas.
Cuando casi eres descubierta, esas lágrimas empiezan a brillar; ¡no engañas a nadie!
Cuando bajo del escenario, se escuchan los ensordecedores aplausos,
Y miras frenéticamente alrededor, mientras las lágrimas siguen cayendo.
Por ti, del bosque que no duerme, te daré este sueño del que nunca despertarás.