La primavera florece con profusión
Con los zapatos aún sobre
El bajo suelo de la ventana
Esta ciudad cabalga las nubes
Regodeándose en ardiente alcohol
Un arrecife coralino tras tus labios
La blandura de tu brazo en la mano
Cuando llega la neblina
Empiezo a intentar recordarte, mas
Tú no estás por ninguna parte
Uh la la, échame una sombra
Tal como se apila la nieve
La noche se torna blanca
El cielo abridero, claro de luna
A lo largo del río brumoso
El camino prosigue
Fingiendo ignorar una ladera repentina
Y aún dices que seguirás adelante
Cuando llega la neblina
Creía que te había atisbado en la estación lejana
…pero se trataba de alguien que yo ya no conozco
Uh la la, estallando y desvaneciéndose
Cuando llega la neblina
Empiezo a intentar recordarte, mas
Tú no estás por ninguna parte
Uh la la, échame una sombra
Uh la la, y, por favor, cuídate